¿DE DÓNDE VOY A SACAR CARTULINA A LAS 11 DE LA NOCHE?
Formando hábitos en nuestros hijos
Por Yllelyna Mamá de Diego
La frase de quién temprano se levanta recoge agua clara, desde que soy mamá no la he entendido muy bien, ya que todas las mañanas yo me levanto a recoger todo lo que no se levantó la noche anterior: juguetes, ropa, cuentos, etc; menos el agua clara. ¡Y eso que tengo un solo hijo! No me quiero imaginar las mamás de 2, de 3 y hasta de 4 hijos. Son unas guerreras y mis respetos.
Recuerdo cuando era mamá de 3 (dos en secundaria y una en primaria ) y me tocaba estar todo el día como sargento dando órdenes y haciendo preguntas, haciendo preguntas y dando órdenes: ¿Ya hicieron la tarea?, Sebastián guarda tus libros y cuadernos, Alejandra apaga el Ipad, ya es hora de dormir. ¿Ya prepararon el uniforme? Daniela la tarea se hace cuando llegamos a la casa, no a las 9 de la noooooche. ¿Dónde voy a sacar cartulina verde y amarilla a las 11 de la noche?
Acaso, ¿alguien se ve reflejado con esta breve descripción? o es un recuerdo de lo que escuchábamos de nuestras mamás con la amenaza final de “cuando tengas a tus hijos me entenderás y me comprenderás”. Palabras de pura sabia la de mi mamá. Créanme que ahora sí la entiendo y tengo una enorme compasión por ella y por la “chancla” que trabajaba horas extras creando hábitos en nosotros. Al final, claro que tendemos la cama, guardamos los juguetes y ordenamos los libros como si fuésemos bibliotecarios. Pero terminamos DES GAS TA DOS, con una enorme carga de corazones lastimados, de gritos y regaños.
Pero, los tiempos cambian. Y a nosotras como mamás nos toca cambiar porque cada hijo es distinto, tiene una manera de aprender y de amar diferentes. Debemos entender su lenguaje de amor para que nuestra orden llegue a su corazón y pueda respondernos desde el respeto y el amor, y no desde la obediencia por sí misma. No creo que la educación de antes fuese mala, solo que las generaciones cambian, nos transforman como seres humanos.
La formación de hábitos de antes y de hoy, se puede hacer de diferente manera. Lo primero que entendí, es que el ejemplo arrastra, el amor genera acción y el respeto enriquece el corazón de hijo y madre.
Entonces para fomentar los buenos hábitos de mi Diego, empecé diciéndole qué debía hacer: “No dejes la ropa tirada en el cuarto y recoge los juguetes”. Indicaciones que no eran precisas porque después de eso debía indicar dónde, cómo o cuándo quería que lo hiciera. Sí funciona, pero en algunas ocasiones o con alguno de los hijos. Por ejemplo, ser preciso con Sebastián con diagnóstico de TDA es efectivo, ¿cansado?, sí pero él necesita precisión para que podamos convivir en armonía. El amor genera acción.
Con Diego, me sirvió hacerlo yo para que el copiara mi conducta. Es decir, que, si le pedía que recogiera sus juguetes, yo tenía que recoger mi cuarto, mis zapatos, mis libros. Sin pensar él va haciendo las cosas que yo hago; si derrama un líquido va y busca le trapeador; cuando yo barro busca su escoba y barre con mamá. Sin darme cuenta lo voy haciendo responsable y respetuoso también del trabajo que mamá hace en casa. El ejemplo arrastra.
Hay otros hijos que son más de palabras y negociación, es el caso de Daniela, aunque diría que ella es un híbrido. Yo lo hago primero y ella me apoya, y si no veo que me apoya se lo pido de la mejor manera, cuando no lo hago de la mejor manera, lo hace pero mi corazón se siente mal ver que lo hace solo por obediencia o sumisión pero con un corazón lastimado. Entonces, acostada en mi cama, me recuerdo cuando mi mamá, un maestro o una figura de autoridad, sin querer, me hizo sentir que mi corazón estaba herido. En ese momento, aún no llegaba a mis manos Disciplina Positiva de Jean Nielsen. Seguro haría las cosas diferentes, porque ahora sé que el respeto enriquece el corazón entre madre e hijo.
Lo que dicen los expertos
Según psicólogos infantiles, la generación de hábitos les ayuda a los niños a constituir virtudes y tener equilibrio emocional, lo que les ayudará a desarrollar su personalidad sin ninguna adversidad. “La construcción de hábitos se trabaja a través del tiempo con horas y minutos establecidos, el espacio y de mutuo acuerdo entre las personas involucradas en la crianza del niño”.
Después de enseñarle la acción (con muchas repeticiones y paciencia), debemos elogiar al pequeño con el logro de sus actividades. Si un día se le olvida, guíelo, no lo regañe. No se remonte al pasado, no lo minimice, no lo compare con otra persona (amigos, hermano o primo ) No lo castigue ni lo amenace. Elogie sus logros.
A decir de los expertos, estos son los 5 hábitos que nuestros hijos deben de tener tatuados para enfrentar el mundo de una manera armoniosa y en el equilibro como ser humano integral.
1.- Alimentación equilibrada
2.- Rutina del sueño
3.- Hora de higiene
4.- Estudios y tareas
5.- Colaborar en casa
Al final del día, preferí cambiar la frase con la que me levantaba del agua clara, mejor tomé la frase de Buda: “Cada mañana nacemos de nuevo. Lo que hacemos hoy es lo que más importa”. Y cada mañana busco una nueva estrategia para educar a quién más amo: Diego.
Para poder tener un feedback, me gustaría que compartieras qué hábitos quieres cambiar del plan familiar y cómo crees que lo podrás lograr:
___________________________________________________________
___________________________________________________________
___________________________________________________________